Con la falta de acceso a las divisas, adquirir tecnología se está volviendo una tarea muy difícil por parte de las empresas. Cómo impacta esto en el usuario final y en los precios.
Argentina atraviesa una profunda crisis económica en la que la escasez de dólares se hace presente, con reservas negativas del BCRA que podrían llegar a los 2 mil millones de dólares. En este contexto, el gobierno nacional ha limitado considerablemente las importaciones, estableciendo una serie de requisitos para acceder al “dólar oficial”, haciendo que traer productos al país sea una misión cada vez más imposible.
Según la consultora ABECEB, en febrero las importaciones cayeron un 10,4% contra el mismo período del año pasado. Además, el gobierno ha endurecido su política contra el sector tecnológico para “fomentar la industria nacional”.
En concreto, el estado nacional elevó considerablemente los aranceles de importación de computadoras portátiles, pasando de una tasa del 0% a una entre el 8% y el 16%, según las características especiales del equipo. La medida se formalizó a través del Decreto 136/2023, que modifica parte del anexo del Decreto 910/2021.
La norma publicada en el Boletín Oficial eleva al 8 % la alícuota de la posición arancelaria 8471.30.12, que comprende a las unidades con un peso inferior a 3,5 kg, con teclado alfanumérico de al menos 70 teclas y con una pantalla de área superior a 140 centímetros cuadrados e inferior a 560 cm2. El mismo porcentaje se sumará a las posiciones 8471.30.19 y 8471.30.90, clasificadas como “las demás” en la Nomenclatura Común del Mercosur (NMC). En cuanto a los equipos de peso inferior a 350 gramos con teclado alfanumérico de por lo menos 70 teclas y con una pantalla de área inferior a 140 cm2, la tasa llegará a 16%.
Esto se traslada directamente a los precios, en los que una computadora o un celular puede costar hasta un 90% más en Argentina en comparación con Chile, si se toma como referencia el dólar oficial, que es el tipo de cambio utilizado por las empresas importadoras.
Además, en el caso de los celulares, algunos modelos solo se pueden conseguir por medio de revendedores que, a diferencia de una casa de electrónica, queda confiar en la contraparte. Con respecto a las casas de electrónica, un celular puede costar hasta USD 3.000, mientras que en otros países como en Paraguay o Chile se consiguen por menos de la mitad.
Estos datos dan cuenta de que al argentino promedio cada vez le cuesta más acceder a la tecnología. Hoy, tiene que trabajar más horas para comprar lo mismo que un año atrás. Y esto siembra un interrogante: ¿qué hacen los argentinos para proteger estos bienes cada vez más preciados?
Adquirir un seguro para dispositivos electrónicos es clave en el contexto actual
Como mencionamos anteriormente, adquirir un dispositivo electrónico como un teléfono celular o una computadora se ha convertido en un verdadero desafío. Además, ante la falta de importaciones, el costo de las reparaciones se ha elevado considerablemente, sobre todo en servicios técnicos especializados que utilizan materiales originales. Por este motivo, las personas que adquieren este tipo de dispositivos suelen buscar contratar, en conjunto, un seguro para prevenir cualquier inconveniente a futuro e incurrir en costos adicionales.
En este sentido, empresas como Tecno Compro, especializadas en ventas de tecnologías de consumo, han incorporado la posibilidad de contratar un servicio de reparaciones prepago que garantiza el normal funcionamiento del producto por un plazo de dos a cuatro años adicionales a la garantía del fabricante.
“En Tecno Compro somos especialistas en determinados productos y tenemos el foco puesto en fidelizar a nuestros clientes, por lo que únicamente nos faltaba este producto que le brindara calma, ya que les otorgará una protección más prolongada”, señala Juan Socorro, gerente comercial de Tecno Compro.
Para Socorro, la incorporación de este servicio ha generado una mayor lealtad entre los clientes y las posibilidades de que estos recomienden a sus tiendas se han multiplicado. Además, con respecto al servicio, el especialista explica que cubre los costos de algunos tipos de reparaciones -aparte de la garantía e incluso después de que se termine la garantía del fabricante- por lapsos que van desde los 24 hasta los 48 meses.
Dicho servicio prepago es brindado por una de la aseguradoras más importantes del país a través de Segurarse, siendo, según Socorro, uno de los pioneros en el desarrollo de este producto. “Elegimos a Segurarse como nuestro proveedor de tecnología, ya que tienen mucha experiencia. Cuentan con un área de desarrollo e innovación que permite llevar a cabo un proyecto como este, brindando seguridad de punta a punta a ambos clientes, la compañía de seguro y al canal”, destaca el experto.
Dicho servicio fue implementado a finales del 2022 e inicios de 2023, y ya cubre 100 sucursales a lo largo del país, especialmente en el rubro de celulares, tablets, computadoras, entre otros.
¿Cómo es la implementación de este servicio por parte de Segurarse?
Alejandro Riedel, gerente de sistemas de Segurarse, explica que la empresa opera como intermediaria, resolviendo la interacción y comunicación entre el retailer, en este caso Tecno Compro, y la aseguradora.
“Esto significa anticiparnos a cualquier necesidad que pueda presentar cualquiera de los actores y tomar decisiones en base a nuestra amplia experiencia en el mercado. Para esto, no solo brindamos asesoramiento comercial, sino que proveemos las herramientas tecnológicas que hacen que esta oportunidad sea una realidad”, señala el experto.
Por otra parte, Alberto Gabriel, CEO de Segurarse, explica que “para los retailers, nuestra tecnología tiene como objetivo proveer un servicio complementario al foco de actuación de la empresa, de manera que ésta agregue valor a su negocio por el fortalecimiento de su marca, la actualización de la base de datos de sus clientes, el aumento del flujo de personas en sus locales, la reducción de la pérdida de clientes gracias a su fidelización, y que sea una propuesta de valor para sus socios estratégicos y empleados por medio de planes de afinidad”.
Por otra parte, para las utilities, la tecnología de la empresa tiene como objetivo diversificar y ampliar el foco de actuación de la empresa, ofreciendo un servicio complementario y una solución estratégica que abarca todo el proceso de comercialización enfocado en la necesidad del cliente. “En el caso de bancaseguros, integramos sistemas tecnológicos que permiten lanzar nuevos productos a través de procesos automatizados y customizables. Implementamos y gestionamos soluciones end-to-end”, profundiza la cabeza del bróker.
En paralelo, Riedel sostiene que la tecnología de Segurarse es una ventaja tanto para las aseguradoras como para la empresa que comercializan los productos o servicios, ya que cuentan con amplia experiencia en el mercado y un equipo dedicado a relevar y atender las necesidades tecnológicas del mismo.
“Nuestra naturaleza es digital, por lo que nuestras herramientas desarrolladas 100% in house siempre han tenido en mente la interconexión de distintos actores de diversos ámbitos. Esto favorece que, tanto la empresa comercializadora como la aseguradora, se puedan centrar en exponer sus necesidades y no tengan que ocuparse de cómo lograr que las mismas se satisfagan”, asegura el experto.
El auge de los seguros embebidos
Alberto Gabriel argumenta que los seguros embebidos se convirtieron en un aliado clave de los retailers, al tratarse de una modalidad de distribución de seguros que redefine los modelos tradicionales, ya que las empresas pueden integrar, ofrecer y vender productos financieros a sus clientes en sus puntos de venta, plataformas digitales y/o e-commerce.
“En pocas palabras, los productos financieros están integrados en un canal que el cliente ya utiliza, en un journey de usuario existente, de empresas generalmente no financieras y, de esta forma, abordan las necesidades específicas. Son claves, porque agregan una contribución marginal importante al negocio sin costos financieros adicionales. Es una fuente adicional de ingresos”, señala el especialista
Finalmente, Riedel señala que la tecnología es de vital importancia para todo lo que las personas hacen en su vida cotidiana. “Cada vez más, será un factor fundamental dados los avances tecnológicos que se nos presentan. Particularmente en nuestro rubro, es indispensable para poder vincular actores de distintos contextos. Adicionalmente, la tecnología no es estática, por lo que es muy importante que esté en constante revisión para mejorar procesos vigentes y encontrar nuevas soluciones”, concluye.